17/8/12

"Señales" (je)

Venimos en días complicados. Entrarle laboralmente al paisito está más que difícil, el medio es muy cerrado y me faltan nombres, contactos a quienes dirigirme directamente. Ya mandé mail a los que figuran en el directorio del Círculo Creativo pero eso de tirar a ver qué pica es muy abierto, nadie te da bola. Así que para empezar necesito almas caritativas que me "presenten" con gente que labure de esto, no sé, que manden mail o algo diciendo "esta mina laburó de esto y está buscando una oportunidad, te paso su CV". Necesito foguearme en entrevistas, qué decir, cómo decirlo, y eso viene con la práctica. Ahora, las almas caritativas que puede que tenga en la vuelta tienen a su vez compromisos, entonces dependo de ellos/as para que hagan efectivo este link y no quiero ser muy pesada tampoco. Pero el tiempo pa$$a.

Por otro lado esto de funcionar en automático tiene sus pros y sus contras, el pro es que pareciera que nunca me hubiera ido y la contra es que ¡pareciera que nunca me hubiera ido! Cierto, he cambiado de franja, ahora no me cuelo con los jóvenes, soy un adulto y las personas de 28 años me dicen "señora"¿dónde cuernos quedaron estos 10 años eh? Pero es como si hubiera regresado la misma que se fue, como si en este tiempo no hubiera aprendido nada, me reencuentro con la que fui y en gran medida es como si tuviera aquella cabeza, aquellos sentimientos e inseguridades, aquellas conductas...eso asusta mal. 

Los mínimos contactos reales que he hecho no son alentadores, más bien manejan lo de "está difícil" "el mercado es chico" "va a demorar", eso asusta también.
Así que ayer me fui a Salinas, a ventilarme y a ver cómo va el asunto de la constru, con eso del susto en la vuelta, tratando de reencontrar a la MaGa atrás de todo eso y pasó algo curioso. Sí, estoy en ese punto que cualquier cosa curiosa que pasa es una puta señal de algo, una señal que uno interpreta como le sopla el viento, y a mi el viento me sopla para apelar a lo místico porque lo concreto dice que la guita se acaba, las oportunidades no aparecen y lentamente viene quedando la fe nomás, la clásica, vieja y querida fe que me ha sacado adelante en miles de oportunidades, esa certeza de que algo va a salir cuando tenga que salir. 

Y en esa estábamos, solos en la parada, cuando aparece un pitbull, uno de esos perros que meten miedo, que si les caés mal te lastran de una mordida, que salen un montón de guita...bueno, uno de esos perros apareció en la esquina y como quien no quiere la cosa se instaló delante nuestro ¿estaría esperando el 709? Y ahí se quedó el perro, con su espalda apoyada tranquilamente sobre mis pies, dueño y señor de la situación. 
A nosotros nos llamó la atención, entre otras cosas porque justamente estuvimos pensando en la posibilidad de tener uno de esos perros y después porque nos fuimos dando cuenta que la gente ¡cruzaba la calle! nadie quería pasar por ahí. El perro ahí se quedó, tan tranquilo, haciéndonos compañía, hasta que subimos al bondi. 

Hay miles de explicaciones normales para este suceso, no creo que fuera un perro perdido, más bien que estaba esperando a su dueño, pero yo arranqué pa la mística y entonces decidí que el "mensaje" es que no tengo que tener miedo porque estoy protegida, y estoy protegida posta, tengo salada protección, así que debería dejarme de joder con eso de andar con el rabo entre las patas y tomar posesión de este país, de esta ciudad, de mi vida y de mi futuro, qué tanto.

Ahora a ver cuánto me dura la manija.

Ahí les dejo la imagen del dulce perrito: